[FONT="Verdana"][I][SIZE="3"][COLOR="Blue"]Mat 12:1-8
1 En aquel tiempo iba Jesús por los sembrados en un día de reposo; y sus discípulos tuvieron hambre, y comenzaron a arrancar espigas y a comer.
2 Viéndolo los fariseos, le dijeron: He aquí tus discípulos hacen lo que no es lícito hacer en el día de reposo.
3 Pero él les dijo: ¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y los que con él estaban tuvieron hambre;
4 cómo entró en la casa de Dios, y comió los panes de la proposición, que no les era lícito comer ni a él ni a los que con él estaban, sino solamente a los sacerdotes?
5 ¿O no habéis leído en la ley, cómo en el día de reposo los sacerdotes en el templo profanan el día de reposo, y son sin culpa?
6 Pues os digo que uno mayor que el templo está aquí.
7 Y si supieseis qué significa: Misericordia quiero, y no sacrificio, no condenaríais a los inocentes;
8 porque el Hijo del Hombre es Señor del día de reposo.[/COLOR][/SIZE][/I][/FONT]

[FONT="Georgia"][SIZE="4"][COLOR="DarkRed"][I][B]uno mayor que el templo está aquí[/B]

Los cuestionamientos que los fariseos presentan al comportamiento de los discípulos son muy parecidos a los que muchos cristianos legalistas esgrimen continuamente contra otros cristianos, intentando coartar su libertad.

Son personas que sienten que es su deber corregir a los demás de acuerdo a su "manualcito de obligaciones cristianas". Siempre encuentran cláusulas limitatorias: que no debes escuchar tal cosa, que no debes vestirte de tal manera, que no debes estar en tal lado, que no debes hacer, que no debes tocar. Viven en la esclavitud de su débil conciencia, y pretenden encadenar también a otros.

Pero los que estamos con Jesús, los que realmente caminamos con él, los que andamos continuamente cerca de nuestro Señor y Salvador, los que recibimos la dirección y la aprobación del Espíritu Santo en lo profundo de nuestro ser, no necesitamos "manualcitos", reglamentos que nos ayuden a darnos cuenta qué es lo correcto, y qué es lo incorrecto, ni mucho menos necesitamos fariseos controladores.

Al buscar de corazón la comunión con Dios, y aprender a guiarnos por la dirección del Espíritu, agradando a Dios, sabemos que estamos en lo correcto.
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[FONT="Verdana"][SIZE="3"][COLOR="Blue"][I]Rom 8:14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.

Gál 5:1 Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.

1Jn 3:21-22
Amados, si nuestro corazón no nos reprende, confianza tenemos en Dios;
y cualquiera cosa que pidiéremos la recibiremos de él, porque guardamos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son agradables delante de él.

Sal 26:2 Escudríñame, oh Jehová, y pruébame;
Examina mis íntimos pensamientos y mi corazón.[/I][/COLOR][/SIZE][/FONT]