El valor de una oración...
Enviado el 18-nov-2014 a las 16:37 por yblancom
Señor...
...Ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes y a no decir mentiras para ganarme el aplauso de los débiles.
Si me das fortuna, no me quites la razón.
Si me das éxito, no me quites la humildad.
Si me das humildad, no me quites la dignidad.
Ayúdame siempre a ver la otra cara de la medalla, no me dejes inculpar de traición a los demás por no pensar igual que yo.
Enséñame a querer a la gente como a mí mismo y a no juzgarme como a los demás.
No me dejes caer en el orgullo si triunfo, ni en la desesperación si fracaso
Más bien recuérdame que el fracaso es la experiencia que precede al triunfo.
Enséñame que perdonar es un signo de grandeza y que la venganza es una señal de bajeza.
Si me quitas el éxito, déjame fuerzas para aprender del fracaso.
Si yo ofendiera a la gente, dame valor para disculparme y si la gente me ofende, dame valor para perdonar.
¡ Señor...si yo me olvido de ti, Tú por favor nunca te olvides de mí !
No es cuanto oras..sino cómo oras y a quién oras lo que determina el valor de la oración. Si te diriges al Padre y tu oración es libre de egoísmos, vanidades o falsas ilusiones, entonces tendrás una oración de calidad.
Si lo afliges y él clama a mí, ciertamente yo escucharé su clamor. Éxodo 22:23
Entonces clamó el pueblo a Moisés, y Moisés oró al Señor y el fuego se apagó. Num 11:2
Entonces clamó Sansón a Dios, y dijo: Señor, acuérdate ahora de mí, y fortaleceme, te ruego, solamente esta vez, oh Dios, para que de una vez tome venganza de los filisteos por mis dos ojos. Juec 16:28
...Ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes y a no decir mentiras para ganarme el aplauso de los débiles.
Si me das fortuna, no me quites la razón.
Si me das éxito, no me quites la humildad.
Si me das humildad, no me quites la dignidad.
Ayúdame siempre a ver la otra cara de la medalla, no me dejes inculpar de traición a los demás por no pensar igual que yo.
Enséñame a querer a la gente como a mí mismo y a no juzgarme como a los demás.
No me dejes caer en el orgullo si triunfo, ni en la desesperación si fracaso
Más bien recuérdame que el fracaso es la experiencia que precede al triunfo.
Enséñame que perdonar es un signo de grandeza y que la venganza es una señal de bajeza.
Si me quitas el éxito, déjame fuerzas para aprender del fracaso.
Si yo ofendiera a la gente, dame valor para disculparme y si la gente me ofende, dame valor para perdonar.
¡ Señor...si yo me olvido de ti, Tú por favor nunca te olvides de mí !
No es cuanto oras..sino cómo oras y a quién oras lo que determina el valor de la oración. Si te diriges al Padre y tu oración es libre de egoísmos, vanidades o falsas ilusiones, entonces tendrás una oración de calidad.
Si lo afliges y él clama a mí, ciertamente yo escucharé su clamor. Éxodo 22:23
Entonces clamó el pueblo a Moisés, y Moisés oró al Señor y el fuego se apagó. Num 11:2
Entonces clamó Sansón a Dios, y dijo: Señor, acuérdate ahora de mí, y fortaleceme, te ruego, solamente esta vez, oh Dios, para que de una vez tome venganza de los filisteos por mis dos ojos. Juec 16:28
Total de comentarios 4
Comentarios
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XCELENTE.
Enviado el 01-dic-2014 a las 11:00 por jopo43 ¡Visita su Blog! -
Muy bien, muy interesante. Bendiciones
Enviado el 21-dic-2014 a las 05:25 por principios ¡Visita su Blog! -
Enviado el 29-sep-2015 a las 01:52 por yblancom ¡Visita su Blog! -
Enviado el 29-sep-2015 a las 01:53 por yblancom ¡Visita su Blog!