El Rutero del Piloto...
Enviado el 09-ago-2012 a las 11:26 por yblancom
EL “RUTERO” DEL PILOTO
“Ordena mis pasos con tu palabra...” Salmo 119:133
Siglos atrás, durante la era de la gran exploración marítima, los veleros atravesaban océanos inmensos, peligrosos y navegaban frente a costas amenazadoras. Los pilotos usaban diversas técnicas de navegación; entre ellas, un libro llamado «rutero» (una especie de bitácora), un diario de sucesos registrados por un viajero anterior, donde relataba los problemas en aguas previamente desconocidas y difíciles. Leyendo los detalles en un rutero, los capitanes podían evitar peligros y atravesar corrientes complicadas.
En muchos aspectos, la vida cristiana es como un viaje, y el creyente necesita ayuda para encontrar el curso correcto y navegar por los mares peligrosos de la vida. Disponemos de esta ayuda porque Dios nos dio Su Palabra, que actúa como un «rutero espiritual». A menudo, al reflexionar sobre un pasaje significativo, recordamos la fidelidad del Señor en medio de circunstancias difíciles. Como señala el salmista, los peligros no solo se hallan en las experiencias de la vida, sino también en nuestra tendencia interior al pecado. Ante esta doble preocupación, el salmista escribió: «Ordena mis pasos con tu palabra, y ninguna iniquidad se enseñoree de mí» Sl. 119:133. Esta declaración también debería ser nuestro deseo, para escapar de malas decisiones, deseos o de las inclinaciones de nuestro corazón, que nos pueden alejar de Dios y Su Voluntad.
Cuando medites y reflexiones sobre las enseñanzas bíblicas, recuerda el cuidado de Dios en el pasado, reafirma tu experiencia al recordar la guía del Señor en circunstancias adversas, aprende de las advertencias y los peligros del pecado. Esta es la ventaja de tener un «rutero espiritual»
Recuerda: Con la Palabra de Dios como mapa y Su Espíritu como brújula, estás seguro de mantener el curso correcto, para no extraviarte en los mares del mundo.
¿Cómo estudiar la Biblia?
Pablo aconsejo a Timoteo que debía dedicarse a la Palabra de Dios ( 1Ti.4:13). El apóstol dijo a su discípulo “Ocúpate” que significa dedícate, déjate absorber. El ministerio de la Palabra era lo más importante, debía darle importancia sobre otras cosas o situaciones. Debemos recordar que la Biblia merece de nuestro tiempo, el mejor que le podamos dar.
Todo cristiano debe ser consciente que es necesario y muy beneficioso un estudio personal de la Biblia, solo en ella el hombre aprende cómo prepararse para la eternidad.
Para podre aprovechar los más grandes beneficios y bendiciones del estudio del libro de Dios, hay algunos importantes requisitos que nos convienen observar:
1) La Biblia debe ser estudiada diariamente (Hch. 17:11). Ya sea en la mañana o en la noche, debemos tomar tiempo para la lectura y estudio de la Biblia. (Sal. 1:1,2)
2) La Biblia debe ser leída y estudiada diligentemente (Hch. 17:11). Observamos la palabra “escudriñaban”, ellos no hacían una lectura rápida sino que la examinaban detalladamente, investigaban e inquirían en ella cuidadosamente. Pedro también nos anima en este sentido. (1P. 1:11) Debemos estudiar la Biblia conscientemente.
3) La Biblia debe ser leída y estudiada también devocionalmente. Después de haber tomado tiempo para leer y estudiar la Escritura, debemos asegurarnos que sus verdades sean aplicadas en nuestras vidas (Dt. 8:3 – 2 Ti.3:16).
4) La Biblia debe ser leída y estudiada doctrinalmente. La Palabra doctrina simplemente significa enseñanza. Solo en la Biblia encontramos las doctrinas básicas y esenciales, del verdadero cristianismo bíblico. Es verdad que algunas doctrinas son mas importantes que otras, pero todas están incluidas en aquello que los judíos llaman “la fe que una vez ha sido dada a los santos” (Judas 3).
5) La Biblia debe ser leída y estudiada en dependencia. Debemos tener en mente que la Biblia es un libro sobrenatural, divinamente inspirado (2 Ti. 3:16). Fue el Espíritu Santo, la tercera persona de la bendita Trinidad quien dirigió a los hombres que escribieron la Biblia (2P. 1:21) Debemos aprender a depender del autor en la enseñanza (Jn. 14:26 – 16:13- 1Co. 2:10).
6) Cuando estudiamos la Biblia diariamente, en forma diligente, en devoción, y dependencia, descubrimos que es un deleite! (Sal. 1:2 – Jer. 15:6 – Sal. 119:16)
Como creyentes y hijos de Dios, muchas veces creemos saberlo todo y estar listos, pero NO, siempre hay luchas, pruebas, momentos dificiles, y lo importante aquí es que entendamos que sin la lectura de la biblia, oración, ayuno, comunión intima con el espirítu santo, será más duro. Si aprendemos a seguir este paso en la tierra, entenderemos que podemos alcanzar esa meta. Solo aprendamos a hacerlo bien!!!
“Ordena mis pasos con tu palabra...” Salmo 119:133
Siglos atrás, durante la era de la gran exploración marítima, los veleros atravesaban océanos inmensos, peligrosos y navegaban frente a costas amenazadoras. Los pilotos usaban diversas técnicas de navegación; entre ellas, un libro llamado «rutero» (una especie de bitácora), un diario de sucesos registrados por un viajero anterior, donde relataba los problemas en aguas previamente desconocidas y difíciles. Leyendo los detalles en un rutero, los capitanes podían evitar peligros y atravesar corrientes complicadas.
En muchos aspectos, la vida cristiana es como un viaje, y el creyente necesita ayuda para encontrar el curso correcto y navegar por los mares peligrosos de la vida. Disponemos de esta ayuda porque Dios nos dio Su Palabra, que actúa como un «rutero espiritual». A menudo, al reflexionar sobre un pasaje significativo, recordamos la fidelidad del Señor en medio de circunstancias difíciles. Como señala el salmista, los peligros no solo se hallan en las experiencias de la vida, sino también en nuestra tendencia interior al pecado. Ante esta doble preocupación, el salmista escribió: «Ordena mis pasos con tu palabra, y ninguna iniquidad se enseñoree de mí» Sl. 119:133. Esta declaración también debería ser nuestro deseo, para escapar de malas decisiones, deseos o de las inclinaciones de nuestro corazón, que nos pueden alejar de Dios y Su Voluntad.
Cuando medites y reflexiones sobre las enseñanzas bíblicas, recuerda el cuidado de Dios en el pasado, reafirma tu experiencia al recordar la guía del Señor en circunstancias adversas, aprende de las advertencias y los peligros del pecado. Esta es la ventaja de tener un «rutero espiritual»
Recuerda: Con la Palabra de Dios como mapa y Su Espíritu como brújula, estás seguro de mantener el curso correcto, para no extraviarte en los mares del mundo.
¿Cómo estudiar la Biblia?
Pablo aconsejo a Timoteo que debía dedicarse a la Palabra de Dios ( 1Ti.4:13). El apóstol dijo a su discípulo “Ocúpate” que significa dedícate, déjate absorber. El ministerio de la Palabra era lo más importante, debía darle importancia sobre otras cosas o situaciones. Debemos recordar que la Biblia merece de nuestro tiempo, el mejor que le podamos dar.
Todo cristiano debe ser consciente que es necesario y muy beneficioso un estudio personal de la Biblia, solo en ella el hombre aprende cómo prepararse para la eternidad.
Para podre aprovechar los más grandes beneficios y bendiciones del estudio del libro de Dios, hay algunos importantes requisitos que nos convienen observar:
1) La Biblia debe ser estudiada diariamente (Hch. 17:11). Ya sea en la mañana o en la noche, debemos tomar tiempo para la lectura y estudio de la Biblia. (Sal. 1:1,2)
2) La Biblia debe ser leída y estudiada diligentemente (Hch. 17:11). Observamos la palabra “escudriñaban”, ellos no hacían una lectura rápida sino que la examinaban detalladamente, investigaban e inquirían en ella cuidadosamente. Pedro también nos anima en este sentido. (1P. 1:11) Debemos estudiar la Biblia conscientemente.
3) La Biblia debe ser leída y estudiada también devocionalmente. Después de haber tomado tiempo para leer y estudiar la Escritura, debemos asegurarnos que sus verdades sean aplicadas en nuestras vidas (Dt. 8:3 – 2 Ti.3:16).
4) La Biblia debe ser leída y estudiada doctrinalmente. La Palabra doctrina simplemente significa enseñanza. Solo en la Biblia encontramos las doctrinas básicas y esenciales, del verdadero cristianismo bíblico. Es verdad que algunas doctrinas son mas importantes que otras, pero todas están incluidas en aquello que los judíos llaman “la fe que una vez ha sido dada a los santos” (Judas 3).
5) La Biblia debe ser leída y estudiada en dependencia. Debemos tener en mente que la Biblia es un libro sobrenatural, divinamente inspirado (2 Ti. 3:16). Fue el Espíritu Santo, la tercera persona de la bendita Trinidad quien dirigió a los hombres que escribieron la Biblia (2P. 1:21) Debemos aprender a depender del autor en la enseñanza (Jn. 14:26 – 16:13- 1Co. 2:10).
6) Cuando estudiamos la Biblia diariamente, en forma diligente, en devoción, y dependencia, descubrimos que es un deleite! (Sal. 1:2 – Jer. 15:6 – Sal. 119:16)
Como creyentes y hijos de Dios, muchas veces creemos saberlo todo y estar listos, pero NO, siempre hay luchas, pruebas, momentos dificiles, y lo importante aquí es que entendamos que sin la lectura de la biblia, oración, ayuno, comunión intima con el espirítu santo, será más duro. Si aprendemos a seguir este paso en la tierra, entenderemos que podemos alcanzar esa meta. Solo aprendamos a hacerlo bien!!!
Total de comentarios 0
