tan profundo y superficial como la vida misma... 
“Acuérdate de Jesucristo”…… carta a un siervo de Dios…
Enviado el 02-ene-2011 a las 22:58 por souljazz
Suena la puerta, un mensajero llega con un tesoro preciado…
su rostro dibuja una sonrisa… y toma la carta… carta de su mentor…
Pasa en su memoria una vez más, el día que lo conoció cuando llego a Listra; cómo fue que le invitó a ir de viaje a cumplir su misión…. Y la primer experiencia dolorosa que tuvo que pasar por causa de Cristo, circuncidarse ya siendo joven… aun recuerda cuando llego a Corinto para alcanzarlo y lo encontró entregado a la predicación de la Palabra de Dios….
Recuerda sus viajes a Roma enviado por su mentor y los días aquellos cuando al lado de grandes hombres de fe, pasaban de una ciudad a otra, a veces en peligros de muerte y en ocasiones en gran gozo con los hermanos….
Recuerda cuando estaba ahí, al lado de su mentor cuando escribía la Carta a los hermanos de Tesalónica, ¡que palabras de reconocimiento a esa congregación! ó la carta a los hermanos de colosas, ¡qué tratado tan bello sobre la persona de Jesucristo!…
Y claro cómo no recordar la primera carta que le envió su mentor a él…. Si esa frase aun acelera su corazón.. “verdadero hijo en la fe”….
Como fue consolado y exhortado para que nadie lo despreciara por ser joven, sino que su vida fuera su mejor carta de autoridad…
¿que dirá ahora su mentor?
Una duda salta por su mente y rápidamente comienza a hacer un análisis de su ministerio…
¿He enseñado la sana doctrina? SI; ¿he vivido conforme a la piedad? Ok; ¿he exhortado al anciano como a padre? Si… y no hace más que decir; estoy peleando la buena batalla….
Pasa a su alcoba mientras va abriendo poco a poco el pergamino, lo quiere hacer a solas, pues no sabe que sorpresa tiene para él; esta nueva carta de Pablo…
Se sienta sobre la vieja silla…
Y la primera frase que atina directo en su corazón llega: “amado hijo”; las lágrimas humedecen sus ojos; aquel anciano ha sido como un padre para él… avanza en la lectura y termina de quebrarse cuando recuerda a su madre y su abue… “hay señoras de Fe… si me vieran hoy”…. Un tiempo de reflexión, nostalgia y agradecimiento inundan el pequeño cuarto…
Se siente impulsado a inclinar su rostro....
Se recupera poco a poco y continúa su lectura… que habilidad de su mentor para Escribir… mira que usar el ejemplo de un soldado, de un atleta y de un labrador para ilustrarle su proceder en la fe… la sonrisa vuelve a su rostro y asienta con la cabeza…
Mas una frase le hace ponerse alerta… “considera lo que te digo y El Señor te de entendimiento en todo”…..
¡A caray!, los ejemplos llevan algo más de lo que él había entendido de entrada… y seguido a esto su lectura se fija en una frase que irrumpe en ese ambiente…
“ACUERDATE DE JESUCRISTO”…
Batalla en su mente.. ¿Mentor, tu sabes que me he esforzado, que me sigo ocupando en la lectura, en la exhortación, en la enseñanza? ¿Por qué tal pregunta? ¿Después de años juntos, después de pasar sin fin de aventuras de fe lado a lado? ¿Qué me qué?
Se levanta y se sienta en la cama, no alcanza a captarlo aun…
Sigue su lectura, muy pausado pues quiere entender bien…”de Jesucristo”, muy bien… mi salvador; el que se entrego así mismo por mi…. Y exclama un suave “gracias Señor”…
continua y ve… “del linaje de David”.. “claro”, piensa; El es Rey… linaje de Reyes en su persona… ¿será a caso que no es mi Rey? "claro que lo es", asienta....
Sigue leyendo; “resucitado de entre los muertos”…. Y asienta una vez mas con su cabeza, mientras lo dice en voz alta.. ¡Es cierto, es tan vivo! Tan real, presente en cada paso que he dado en toda mi vida….
Ahora sí, no puede contener una expresión de gozo… “¡es por El que soy lo que Soy, es por El que vivo y sigo en la carrera!”
Entiende claramente porque su mentor le ha expresado eso…. “Es nuestro evangelio, tan propio, tan encarnado en su mentor y en él”… evangelio que les trajo salvación; evangelio que transformó su historia, que les dio un propósito celestial a su vida… que les permite sufrir injusticias por amor a otros… y aun con todo entender que La Palabra de Dios nada ni nadie la detiene…
Esta impresionado… deja el rollo sobre la cama y sale al recinto… toma un vaso con agua… y vuelve a sonreír al recordar… . “Acuérdate de Jesucristo”….
Deja el vaso y emprende sus pasos a la alcoba, será una larga noche….
Siervo de Dios que hoy das lectura a esto…. Acordémonos de Jesucristo…
su rostro dibuja una sonrisa… y toma la carta… carta de su mentor…
Pasa en su memoria una vez más, el día que lo conoció cuando llego a Listra; cómo fue que le invitó a ir de viaje a cumplir su misión…. Y la primer experiencia dolorosa que tuvo que pasar por causa de Cristo, circuncidarse ya siendo joven… aun recuerda cuando llego a Corinto para alcanzarlo y lo encontró entregado a la predicación de la Palabra de Dios….
Recuerda sus viajes a Roma enviado por su mentor y los días aquellos cuando al lado de grandes hombres de fe, pasaban de una ciudad a otra, a veces en peligros de muerte y en ocasiones en gran gozo con los hermanos….
Recuerda cuando estaba ahí, al lado de su mentor cuando escribía la Carta a los hermanos de Tesalónica, ¡que palabras de reconocimiento a esa congregación! ó la carta a los hermanos de colosas, ¡qué tratado tan bello sobre la persona de Jesucristo!…
Y claro cómo no recordar la primera carta que le envió su mentor a él…. Si esa frase aun acelera su corazón.. “verdadero hijo en la fe”….
Como fue consolado y exhortado para que nadie lo despreciara por ser joven, sino que su vida fuera su mejor carta de autoridad…
¿que dirá ahora su mentor?
Una duda salta por su mente y rápidamente comienza a hacer un análisis de su ministerio…
¿He enseñado la sana doctrina? SI; ¿he vivido conforme a la piedad? Ok; ¿he exhortado al anciano como a padre? Si… y no hace más que decir; estoy peleando la buena batalla….
Pasa a su alcoba mientras va abriendo poco a poco el pergamino, lo quiere hacer a solas, pues no sabe que sorpresa tiene para él; esta nueva carta de Pablo…
Se sienta sobre la vieja silla…
Y la primera frase que atina directo en su corazón llega: “amado hijo”; las lágrimas humedecen sus ojos; aquel anciano ha sido como un padre para él… avanza en la lectura y termina de quebrarse cuando recuerda a su madre y su abue… “hay señoras de Fe… si me vieran hoy”…. Un tiempo de reflexión, nostalgia y agradecimiento inundan el pequeño cuarto…
Se siente impulsado a inclinar su rostro....
Se recupera poco a poco y continúa su lectura… que habilidad de su mentor para Escribir… mira que usar el ejemplo de un soldado, de un atleta y de un labrador para ilustrarle su proceder en la fe… la sonrisa vuelve a su rostro y asienta con la cabeza…
Mas una frase le hace ponerse alerta… “considera lo que te digo y El Señor te de entendimiento en todo”…..
¡A caray!, los ejemplos llevan algo más de lo que él había entendido de entrada… y seguido a esto su lectura se fija en una frase que irrumpe en ese ambiente…
“ACUERDATE DE JESUCRISTO”…
Batalla en su mente.. ¿Mentor, tu sabes que me he esforzado, que me sigo ocupando en la lectura, en la exhortación, en la enseñanza? ¿Por qué tal pregunta? ¿Después de años juntos, después de pasar sin fin de aventuras de fe lado a lado? ¿Qué me qué?
Se levanta y se sienta en la cama, no alcanza a captarlo aun…
Sigue su lectura, muy pausado pues quiere entender bien…”de Jesucristo”, muy bien… mi salvador; el que se entrego así mismo por mi…. Y exclama un suave “gracias Señor”…
continua y ve… “del linaje de David”.. “claro”, piensa; El es Rey… linaje de Reyes en su persona… ¿será a caso que no es mi Rey? "claro que lo es", asienta....
Sigue leyendo; “resucitado de entre los muertos”…. Y asienta una vez mas con su cabeza, mientras lo dice en voz alta.. ¡Es cierto, es tan vivo! Tan real, presente en cada paso que he dado en toda mi vida….
Ahora sí, no puede contener una expresión de gozo… “¡es por El que soy lo que Soy, es por El que vivo y sigo en la carrera!”
Entiende claramente porque su mentor le ha expresado eso…. “Es nuestro evangelio, tan propio, tan encarnado en su mentor y en él”… evangelio que les trajo salvación; evangelio que transformó su historia, que les dio un propósito celestial a su vida… que les permite sufrir injusticias por amor a otros… y aun con todo entender que La Palabra de Dios nada ni nadie la detiene…
Esta impresionado… deja el rollo sobre la cama y sale al recinto… toma un vaso con agua… y vuelve a sonreír al recordar… . “Acuérdate de Jesucristo”….
Deja el vaso y emprende sus pasos a la alcoba, será una larga noche….
Siervo de Dios que hoy das lectura a esto…. Acordémonos de Jesucristo…
Total de comentarios 3
Comentarios
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AMEN, AMEN Y AMEN
mil gracias hermano, gracias por hacernos reflexionar que sin EL nada somos, hasta nuestro hermano Pedro confeso un día:
"Señor a donde iremos, si solo TÙ tienes PALABRA de vida eterna".
AMEN.
Dios te siga bendiciendo y utilizando para su honra y su gloria.
AbrazosEnviado el 05-ene-2011 a las 00:39 por Maribel 
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El es Rey de Reyes. En ocasiones se nos olvida que vive con nosotros, que nos prometio no dejarnos y asi es, Amen.
Acordemonos de Jesucristo, que tanto nos dio. Que nos sigue sigando, si lo dejamos.... Claro esta, porque a veces queremos hacerlo '' a nuestra manera". Es un error.
Que el Espiritu Santo te siga poniendo esta inspiracion para Gloria de Nuestro Senor Jesuscrito y Nuestro Dios. AmenEnviado el 26-mar-2011 a las 17:00 por Hop -
Muchas gracias Soul por poner en retrospectiva aquel joven Timoteo y aquel Pablo haciendo resaltar a Jesucristo y su obra con favor y gracia hacia nosotros en este presente.
Enviado el 05-abr-2013 a las 23:03 por silvi
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