[FONT="Lucida Sans Unicode"][SIZE="6"][CENTER][COLOR="Yellow"](para ver mejor qué sucede adentro)[/COLOR][/CENTER][/SIZE][/FONT]
Mateo 14:22-33
Enviado el 27-Jan-2011 a las 14:22 por SergioFe
[FONT="Verdana"][SIZE="3"][COLOR="Blue"][I][B]Mateo 14:22-33[/B]
22 En seguida Jesús hizo a sus discípulos entrar en la barca e ir delante de él a la otra ribera, entre tanto que él despedía a la multitud.
23 Despedida la multitud, subió al monte a orar aparte; y cuando llegó la noche, estaba allí solo.
24 Y ya la barca estaba en medio del mar, azotada por las olas; porque el viento era contrario.
25 Mas a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos andando sobre el mar.
26 Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo.
27 Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!
28 Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas.
29 Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús.
30 Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame!
31 Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?
32 Y cuando ellos subieron en la barca, se calmó el viento.
33 Entonces los que estaban en la barca vinieron y le adoraron, diciendo: Verdaderamente eres Hijo de Dios.[/I][/COLOR][/SIZE][/FONT]
[FONT="Georgia"][SIZE="3"][COLOR="DarkRed"][B][I]subió al monte a orar aparte; y cuando llegó la noche, estaba allí solo[/I][/B]
Podríamos quedarnos observando esa barca que sin Jesús no puede avanzar, y reflexionar sobre nuestra vida: ¿Cómo venceremos las adversidades y la oposición?
Podríamos mirar después a una persona extraordinaria que demuestra tener control sobre los elementos, caminando sobre el agua, y cómo todo se calma cuando él sube a la barca. Necesito esa paz.
Podríamos admirar el atrevimiento de Pedro, que pide cosas que a nadie se le hubieran ocurrido, y cómo el señor es bueno y generoso, aún frente a la debilidad de las dudas. Quiero también participar de tu andar, Señor.
Haríamos tambien una reflexión sobre ese impulso a adorar que sintieron los discípulos, como nos sucede cada vez que avanzamos un poco en el conocimiento de Nuestro Salvador. Así es, eres digno de adoración, Señor.
Pero me detengo mejor en este detalle: Jesús estuvo orando. Orando solo, apartado. Despreocupándose de todo lo demás. Habando largamente con el Padre. Quisiera saber cómo fue esa oración. ¡Fueron varias horas!
Así que no es Jesús caminando sobre el agua el que yo debo intentar imitar, sino más bien aquel que en un lugar apartado sin ponerse a pensar en lo que quedaba pendiente, se dedicó a la comunicación con el Padre.
Una vida de oración es la explicación, el trasfondo de una vida de victoria, fructífera, efectiva, poderosa.
Si Jesús lo necesitó, ¿porqué yo vivo a veces como si no lo necesitara? Mejor sería imitar en esto a mi Salvador, quien nos dejó el ejemplo.
Señor, dame por tu Espíritu el deseo, la sabiduría, la urgencia, la ocasión, la claridad, para buscarte en oración incansablemente, profundamente, intensamente, extensamente. Para plantearte todas las cosas que me preocupan, entender las cosas que te interesan a vos, para que cada paso de mi andar sea fructífero, efectivo, útil, valioso.
[COLOR="Blue"][I]Efesios 5:15-17
15 Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios,
16 aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.
17 Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.[/I][/COLOR][/COLOR][/SIZE][/FONT]
22 En seguida Jesús hizo a sus discípulos entrar en la barca e ir delante de él a la otra ribera, entre tanto que él despedía a la multitud.
23 Despedida la multitud, subió al monte a orar aparte; y cuando llegó la noche, estaba allí solo.
24 Y ya la barca estaba en medio del mar, azotada por las olas; porque el viento era contrario.
25 Mas a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos andando sobre el mar.
26 Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo.
27 Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!
28 Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas.
29 Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús.
30 Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame!
31 Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?
32 Y cuando ellos subieron en la barca, se calmó el viento.
33 Entonces los que estaban en la barca vinieron y le adoraron, diciendo: Verdaderamente eres Hijo de Dios.[/I][/COLOR][/SIZE][/FONT]
[FONT="Georgia"][SIZE="3"][COLOR="DarkRed"][B][I]subió al monte a orar aparte; y cuando llegó la noche, estaba allí solo[/I][/B]
Podríamos quedarnos observando esa barca que sin Jesús no puede avanzar, y reflexionar sobre nuestra vida: ¿Cómo venceremos las adversidades y la oposición?
Podríamos mirar después a una persona extraordinaria que demuestra tener control sobre los elementos, caminando sobre el agua, y cómo todo se calma cuando él sube a la barca. Necesito esa paz.
Podríamos admirar el atrevimiento de Pedro, que pide cosas que a nadie se le hubieran ocurrido, y cómo el señor es bueno y generoso, aún frente a la debilidad de las dudas. Quiero también participar de tu andar, Señor.
Haríamos tambien una reflexión sobre ese impulso a adorar que sintieron los discípulos, como nos sucede cada vez que avanzamos un poco en el conocimiento de Nuestro Salvador. Así es, eres digno de adoración, Señor.
Pero me detengo mejor en este detalle: Jesús estuvo orando. Orando solo, apartado. Despreocupándose de todo lo demás. Habando largamente con el Padre. Quisiera saber cómo fue esa oración. ¡Fueron varias horas!
Así que no es Jesús caminando sobre el agua el que yo debo intentar imitar, sino más bien aquel que en un lugar apartado sin ponerse a pensar en lo que quedaba pendiente, se dedicó a la comunicación con el Padre.
Una vida de oración es la explicación, el trasfondo de una vida de victoria, fructífera, efectiva, poderosa.
Si Jesús lo necesitó, ¿porqué yo vivo a veces como si no lo necesitara? Mejor sería imitar en esto a mi Salvador, quien nos dejó el ejemplo.
Señor, dame por tu Espíritu el deseo, la sabiduría, la urgencia, la ocasión, la claridad, para buscarte en oración incansablemente, profundamente, intensamente, extensamente. Para plantearte todas las cosas que me preocupan, entender las cosas que te interesan a vos, para que cada paso de mi andar sea fructífero, efectivo, útil, valioso.
[COLOR="Blue"][I]Efesios 5:15-17
15 Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios,
16 aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.
17 Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.[/I][/COLOR][/COLOR][/SIZE][/FONT]
Total de comentarios 1
Comentarios
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Excelente nota amado hno.; que el Espíritu Santo siga derramando sabíduria y unción sobre su vida. Abrazo fraternal en Cristo Jesús.
Enviado el 21-Apr-2011 a las 20:16 por GladysSalome ¡Visita su Blog!